Wednesday, July 22, 2020

Semana 12. Educación para la salud familiar.

       Tenemos una necesidad importante de mejorar la salud en nuestro país, por lo que la educación toma un punto de relevancia especial, si tomamos en cuenta las directrices a las que se puede actual y lo que se puede lograr, se tendría injerencia directa en la dieta, aunque para ésto muchas de las veces será mediante la reeducación de los hábitos alimentarios, que están tan arraigados en nuestra población, también mediante la promoción de la actividad física para lograr mejoras psicosociales y así reducir los problemas de obesidad y sobrepeso, por lo que tendremos que utilizar también algunos otros programas de intervención, los cuales tenemos en el Instituto.

       Podremos lograr la educación para la salud, a través de algunos componentes, como son: la capacitación y sensibilización a familias mediante talleres, propiciando la participación activa y continua de familias, elaboración de material audiovisual de difusión, cartillas informativas y eficiente acceso a la salud, por lo que se requieren de políticas públicas que apoyen la difusión por parte de medios de comunicación masiva, radio y televisión, así como una ley de etiquetado con información nutricional, situaciones que estimulen, promuevan y potencien las habilidades de autocuidado que cada uno tenemos, y harán partícipe de su salud a la población, dando así parte de responsabilidad, mucha de la cual recae en los servidores de salud.

       Termino citando a Paulo Freire, pedagogo de nacionalidad brasileña, quien dijo "La educación es un acto de amor, por tanto, un acto de valor", así que hagamos nuestra labor con amor, eduquemos y transformemos el lugar en que vivimos a través de las personas que lo habitan.

Referencias bibliográficas:

  • Mamani Huaynoca, M., & Calderon Quispe, M. I. T. (2019). Promoviendo la cobertura del programa SAFCI a través de la educación para la salud en el Municipio de Patacamaya.  [Internet] Disponible en: https://repositorio.umsa.bo/bitstream/handle/123456789/23153/CS.ED.-1255.pdf?sequence=1&isAllowed=y
  • Parra, C. V. G., Thompson, M. P., & Morgado, M. L. (2017). EDUCACIÓN PARA LA SALUD EN ADOLESCENTES Y JÓVENES DESDE EL CONTEXTO COMUNITARIO. Magazine de las Ciencias: Revista de Investigación e Innovación, 2(2), 51-56. [Internet] Disponible en: https://revistas.utb.edu.ec/index.php/magazine/article/view/247
  • Condeles Pedro Cesar, Bracarense Carolina Feliciana, Parreira Bibiane Dias Miranda, Rezende Marina Pereira, Chaves Lucieli Dias Pedreschi, Goulart Bethania Ferreira. Teamwork in the Family Health Strategy: professionals’ perceptions. Esc. Anna Nery  [Internet]. 2019 ;  23( 4 ): e20190096. Available from: http://www.scielo.br/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1414-81452019000400214&lng=en.  Epub Sep 30, 2019.  https://doi.org/10.1590/2177-9465-ean-2019-0096.

Semana 11. Atención médica familiar anticipatoria ante enfermedades frecuentes.

       Nuestra atención, como médicos familiares, y en general del profesional del primer nivel de atención médica debe encaminarse cada vez más a la prevención, a la detección y a la anticipación de enfermedades frecuentes, como son las enfermedades cardiovasculares, diabetes tipo 2, sobrepeso, obesidad, cáncer, muchas de las cuales se asocian al desarrollo de Síndrome Metabólico con sus particularidades y complicaciones.

       Pues somos quienes realizan valoraciones iniciales del paciente, además de la atención de forma integral, longitudinal, personalizada que deberá repercutir de manera efectiva en la prevención y promoción de la salud, con intervenciones en el marco familiar y en la comunitario, integrando además los factores físicos, psicológicos y sociales, y no únicamente como puerta de entrada al segundo o tercer nivel de atención.

       Tenemos, por ejemplo, como un indicador claro que la interpretación del IMC como la evidencia de obesidad marcada por la OMS y es un elemento clínico inmediato y relevante que tenemos los médicos familiares para asociarlo con las enfermedades frecuentes comentadas anteriormente, así como identificar de manera adecuada las necesidades de salud a las que nos enfrentamos en el día a día.

       Por lo tanto si logramos que nuestros pacientes participen de su salud, y modifiquen en una o más categorías de esta, entonces nos dirigiremos hacia un mejor control clínico, metabólico y podremos mejorar el nivel de salud, que incluso se manifestará como un menor costo de los servicios de la salud a nivel tanto individual, familiar y comunitario como estatal y federal, por lo que sería éste último quien debería enfocar las políticas y los esfuerzos en salud a la atención primaria, pues es ésta nivel quien coordina y gestiona los recursos de manera costo-eficiente.

Referencias bibliográficas:
  • Dois, A., Bravo, P., & Soto, G. (2017). Atributos y características de los principios orientadores del Modelo de Atención Integral de Salud Familiar y Comunitaria desde la perspectiva de expertos en APS. Revista médica de Chile, 145(7), 879-887. Disponible en: https://scielo.conicyt.cl/scielo.php?pid=S0034-98872017000700879&script=sci_arttext&tlng=e
  • Zarazaga, A., Franco López, Á., & Culebras, J. M. (2020). Medicina anticipatoria vs medicina preventiva. Como crear enfermos buscando la salud.(I) Las Estadísticas. Journal of Negative and No Positive Results, 5(1), 8-20. Disponible en: http://scielo.isciii.es/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S2529-850X2020000100008
  • Hernández, L. J., Ocampo, J., Ríos, D. S., & Calderón, C. (2017). El modelo de la OMS como orientador en la salud pública a partir de los determinantes sociales. Revista de Salud Pública, 19, 393-395. Disponible en: https://www.scielosp.org/article/rsap/2017.v19n3/393-395/

Tuesday, July 14, 2020

Semana 10. Abordaje de las conductas de riesgo para la salud.

       Conductas de riesgo para salud en nuestra población derechohabiente a la UMF 21, con gran número de adolescentes, jóvenes y adultos jóvenes de quienes conocemos provienen de demarcaciones con bajo nivel socio económico bajo, bajo nivel educativo, con altos índices de violencia y delincuencia, así como permeadas de crimen organizado.

       Según la Encuesta Nacional de Adicciones el 4.8 por ciento de la población urbana general entre 12 y 65 años ha consumido una o más de las drogas investigadas, lo que significa que existen 1 713 000 usuarios de drogas de cuando menos una sola vez; en el caso de la población masculina, el porcentaje se eleva a 7.6 por ciento, en especial en comunidades como la que atendemos en la Unidad.

       Con este panorama, tenemos una población con alta probabilidad de presentar conductas de riesgo para la salud, y no solo de uso de sustancias ilícitas, algunas sustancias legales como son el tabaco y alcohol -consumido cada vez más por mujeres-, las cuales se han relacionado con el desarrollo de ciertos tipos de cáncer, porcentaje que aumenta si lo relacionamos con sobrepeso y obesidad, relacionados con el sedentarismo.

       Otro tipo de conducta de riesgo a abordar es el estrés, situación que se ha estudiado ampliamente con relación a la ingesta de alimentos con poco valor nutricional, en especial el exceso de consumo de los mismos, al desarrollo de enfermedades tanto mentales, p.ej. depresión, como sistémicas, es el caso de la hipertensión arterial y enfermedades cardiovasculares en general.

       Así es que el rango de acción es muy amplio, partamos por la educación en nuestra consulta diaria, en insistir en el apego a hábitos saludables y autocuidado, partiendo del conocimiento de nuestra comunidad, y sabiendo también que la mayor parte de las drogas ilícitas se obtuvo, por primera vez, a través de algún amigo o conocido y en la propia casa.

Referencias bibliográficas:

  • Roco Ángela, Cerda Berta, Cayún Juan Pablo, Lavanderos Alejandra, Rubilar Juan Carlos, Cerro Roberto et al . Farmacogenética, tabaco, alcohol y su efecto sobre el riesgo de desarrollar cáncer. Rev. chil. pediatr.  [Internet]. 2018  Ago [citado  2020  Jul  10] ;  89( 4 ): 432-440. Disponible en: https://scielo.conicyt.cl/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0370-41062018000400432&lng=es.  http://dx.doi.org/10.4067/S0370-41062018005000709.
  • Angulo Acosta, J. A. (2018). Factores asociados a sedentarismo en estudiantes de ciencias de la salud. [Internet]. 2018  Ago [citado  2020  Jul  10] ; Disponible en: http://200.62.226.186/handle/upaorep/3867
  • Stoyanovich, P. A. (2019). Estrés como factor de riesgo en hipertensión arterial: una revisión sistemática. [citado  2020  Jul  10] ; Disponible en: http://hdl.handle.net/2183/24179

Friday, July 3, 2020

Semana 8. Cartilla de la Mujer Embarazada.

Cartilla de la Mujer Embarazada.

Las personas embarazadas son una parte muy sensible de la población que atendemos como Médicos Familiares, y es que se trata de una persona muy vulnerable tanto física como psicológicamente, contemplando los cambios propios del embarazo, las enfermedades propias del mismo y las condiciones sociales y laborales que se presentan en esta etapa.

Sabemos que tienen derechos, tanto al momento de recibir una consulta médica, como derechos para participar de las decisiones sobre su atención y de forma especial sobre el método anticonceptivo que desee continuar después de finalizado este embarazo.

Es por esto que debemos ser muy claros en nuestra atención a la persona embarazada, respetar su intimidad, brindar información suficiente y clara, sobre datos de alarma, acompañamiento, para el momento de toma de decisiones.

Tenemos en el Instituto Mexicano del Seguro Social diversas herramientas para este fin, por lo que debemos enviar a nuestras personas embarazadas a estos: Pláticas, cursos y talleres, que ayudan a mejorar la calidad de la alimentación, higiene, actividad física, planificación familiar, atención del parto, cuidados postparto o postcesárea, lactancia materna.

Por otra parte, contamos con un apartado especial de Control y Seguimiento del Embarazo, debemos tomar en cuenta factores como peso al inicio del embarazo, FUM, número de consultas, incapacidad por maternidad, fecha probable de parto, sintomatología y datos de alarma por consulta, que junto con exámenes de laboratorio y pruebas de gabinete, más el esquema de vacunación en esta etapa, nos ayudarán a dar un mejor seguimiento al embarazo de nuestra paciente, con la finalidad de llevarlo a término sin complicaciones y con una maternidad exitosa.

Referencias bibliográficas:


  • Cartilla de la Mujer Embarazada. Gobierno de México. Instituto Mexicano del Seguro Social. Consultada el 25/06/2020 en http://www.imss.gob.mx/sites/all/statics/maternidad/pdf/cartillaEmbarazo.pdf
  • del Valle, M. P. E., González, J. L., Álvarez, B. V., Ramírez, J. A., Taborda, Y. T., & Vidal, A. F. (2019). Evaluación del seguimiento de embarazo de bajo riesgo en el Área Sanitaria V del Principado de Asturias. Matronas profesión, (2), 65-72.

Semana 7. Programas Integrados de Salud: Adulto mayor.

Programas Integrados de Salud: Adulto mayor.

Las personas de 60 años en adelante tienen sus características de salud particulares e individuales, al dar atención primaria por primera vez debemos preguntar, investigar, analizar, para tener un panorama general de cómo ha sido la vida de esta persona, qué situaciones positivas y negativas ha tenido, tomando en cuanta que ha tenido probablemente cuidados -adecuados o no-, trabajos -con probables riesgos-, alimentación, enfermedades -tanto infecciosas como crónicas y el control de estas últimas-, pero entendiendo que siguen siendo entes bio-psico-sociales y culturales, por lo que múltiples factores condicionantes interfirieron en su vida, así como otros que seguirán interfiriendo.

En esta etapa de la vida es de suma importancia la educación en el sentido del cuidado de la salud tanto en las actividades de la vida diaria, pero también al momento de realizar actividad física como yoga o pilates, que es fundamental, así como la prevención de caídas. De igual forma considero de suma importancia la salud mental, ya que en esta etapa se suele caer en el abandono, en el aislamiento, situaciones clave en el desarrollo de enfermedades mentales como la depresión, por lo que debemos fomentar que exista un adecuado entorno favorable de salud, que se cuente con una red de apoyo, y por qué no, vida sexual activa y saludable, ya que es parte esencial del ser humano y parte del envejecimiento activo.

Otro punto importante es la detección de enfermedades propias de esta etapa, artritis/osteoartrosis, osteoporosis, enfermedad prostática y patologías gincológicas, pero también debemos hacer énfasis en las enfermedades prevenibles con la vanucación: Influenza, neumococo, tétanos, difteria, para lo que echaremos mano de uno de los servicios indispensables de la Unidad de Medicina Familiar: Medicina Preventiva en el primer nivel de atención.

Referencias bibliográficas:
  • Guía para el cuidado de la Salud: Adultos mayores de 60 años y más. Gobierno de México. Instituto Mexicano del Seguro Social. 2018. Consultada el 17/06/2020 en http://www.imss.gob.mx/sites/all/statics/salud/guias_salud/2018/guia-salud-adulto-mayor-2018.pdf
  • Cabaco, A. S., Mateos, L. M. F., Rueda, A. V., & Calzada, A. C. (2017). Envejecimiento activo y reserva cognitiva: Guía para la evaluación y la estimulación. Studia Zamorensia, (16), 195-204.